La lactancia materna es un proceso que cada madre debe aprender a llevar a su ritmo, respondiendo a sus necesidades y a las de su bebé. Si bien la Organización Nacional de la Salud promueve la lactancia exclusiva como la mejor forma de alimentar al bebé durante sus primeros 6 meses, existen eventualidades que no permiten que las madres puedan hacerlo aun cuando lo quieran.
Este es un aspecto que debes tener en mente para no frustrarte a la hora de definir la forma en la que se alimentará tu bebé, puesto que esto deberás decidirlo tú, sin sentirte presionada o comprometida a hacer algo que no puedas manejar.
Es por ello, que hoy te traemos dos métodos para que puedas probar a ver si te funcionan, ambos han sido probados por numerosas mujeres, haciendo que puedan cumplir con sus actividades sin descuidar a su más preciado tesoro: su hijo.
Contents
Lactancia mixta
Es posible que hayas escuchado de este tipo de lactancia anteriormente, siendo una de las maneras más populares de hacerlo en estos días. Su principal característica es que se utiliza tanto la leche materna como la fórmula, alternándolas para nutrir al bebé de forma conjunta.
En general, muchas madres con problemas de producción de leche y mastitis pueden decidir realizar este tipo de alimentación complementaria. Sin embargo, también pueden verse los casos de mujeres que no se encuentran preparadas para la lactancia exclusiva, por lo que piensan que el bebé no se nutre lo suficiente o que no tiene tiempo para pasar todo el rato dando el pecho.
Las razones pueden ser tan numerosas como las mujeres, dejando en claro que cada caso es único y diferente entre sí.
Este proceso puede llevarse a cabo de dos formas: dando el pecho y terminando con la fórmula o alternando una toma de pecho con otra de fórmula.
Aspectos a tener en cuenta con el sistema mixto
Este método de alimentación puede ser mucho más cómodo para ti, puesto que te permite compartir la tarea de darle de comer a tu bebé con tu pareja o algún otro miembro de tu familia o una niñera. No obstante, debes tener especial cuidado con algunos puntos relevantes para que nada se vaya de tu control.
Para comenzar, cuida que las tomas del pecho sean con tiempos regulares, ya que de lo contrario la producción de leche irá bajando hasta desaparecer por completo. Por ello, si quieres mantener la lactancia mixta por un tiempo, deberás cuidarte de estimular el seno y darle de comer a tu hijo con regularidad.
Por otra parte, también es necesario que se utilicen biberones de succión lenta, esto promueve que el bebé siga aceptando el pecho, puesto que si su alimentación se realiza mucho más rápido con el biberón, tenderá a preferirlo.
Este punto también es importante durante el método de lactancia diferida, siendo siempre necesario dejar que el niño se adapte al pecho y al biberón al mismo tiempo.
Pros y contras del método mixto
Como hemos dicho antes, una de las principales ventajas es que puedes utilizar la ayuda de otras personas para alimentar a tu bebé. Esto favorece que descanses por más tiempo y puedas relajarte.
Igualmente, el destete es más rápido y fácil, puesto que ya se encuentra acostumbrado a comer de ambas formas y no tendrá que sufrir por perder la alimentación del pecho.
Por otro lado, entre los contras podemos encontrar que se deben preparar los biberones siempre antes de las tomas, por lo que suele ser un poco engorroso. No es que suponga un gran esfuerzo, pero puede hacer que pierdas un poco de tiempo cada vez.
Lactancia diferida
Este método de lactancia se refiere a darle de tomar tu leche a tu bebé sin tenerlo prendido en el pecho. De esta forma, deberás extraerte la leche que se necesita para la ingesta del bebé y dársela a través de un biberón.
Muchas mujeres optan por este método cuando deben volver a trabajar o cuando desean involucrar a sus parejas en la alimentación del infante. A pesar de ello, existen otras madres que no tienen opción, ya que sus bebés nacieron prematuros o que son de bajo peso y debe controlarse el total de alimento que comen cada vez.
En este caso, deben seguir algunas recomendaciones especiales como saber extraer la leche, tener un extractor adecuado, mantener apropiadamente el tema del almacenamiento y conservación de la leche, entre otros aspectos.
Sin embargo, este sistema es fácil de seguir y te permite mantener la lactancia sin mucho esfuerzo, ayudándote a continuar con tu vida lo más normal posible.
Extractores de leche
Para poder llevar a cabo la lactancia diferida de manera exitosa hace falta más que solo la extracción manual de leche. Es por ello, que es necesario contar con un extractor de leche que cumpla con tus necesidades.
Si eres de las que se extrae la leche poco o que sale de viaje con su bebé en distintas ocasiones, lo mejor es que cuentes con un sacaleches manual que puedas llevar de un sitio a otro sin problemas.
No obstante, si tu intención es hacerte extracciones continuas para crear tu propio banco de leche y deseas ser mucho más eficiente en cuanto al tiempo invertido para ello, te aconsejamos hacerte con un extractor eléctrico.
Ambos dispositivos te ayudarán a cumplir tu meta de alimentar a tu bebé sin problemas, siendo necesario que investigues cómo realizar una extracción segura, así como el proceso de almacenamiento y conservación de la leche materna.
Una decisión personal
Muchas instituciones instan a las madres a llevar a cabo la lactancia materna exclusiva por los primeros 6 meses de vida del bebé, lo cual no está mal. Sin embargo, esta decisión es muy personal y dependerá de tus necesidades y estilo de vida, si trabajas dentro o fuera de casa, si padeces alguna enfermedad, etc.
Siéntete libre de manejar el tema como mejor te parezca para tu bienestar y el de tu bebé, puesto que esto es justo lo que más debería preocuparte.
DEJA UN COMENTARIO
0 COMENTARIOS